sábado, 30 de junio de 2012

29 de junio

Extraño día que contó con un abanico de emociones, que voy a tardar semanas en procesar. Situaciones confusas, miradas, roses, no se si mi cabeza lo invento, o todo ocurrió.
Ya no me es extraño, que mi mente le juegue malas pasadas al corazón. Como un torbellino las ideas dan vueltas en mi cabeza, intentando hilar alguna respuesta.
El tiempo pasa, y sigo estancada en lo mismo, no creo tener el coraje de hablarte ni dejar esto en el olvido.
Estabas feliz, sonriendo, como en un final de cuento. Estabas en otra, con otra. Miraba la escena, y se hacía cada vez más cercana tu ausencia.
Te miro y no me miras, te toco y no hay conexión, pero no se apaga mi ilusión. Aunque tal vez no sepa manejar la situación. Pero ahora lo que quiero, es estar vos.

viernes, 29 de junio de 2012

¿Todo va a estar bien?


Escalofríos que me recorren desde la punta de mis pies hasta la cúspide de mi cuerpo. Recuerdos horribles que me vienen a la mente. Los quiero sacar pero son más fuertes que yo. Debo enfrentar la realidad y asumir que pasaron, quiera o no. Son las cosas de la vida, injustas para mí, injustas para muchos.
Dicen que el tiempo cura las heridas, pero creo que estas no son heridas, son marcas en la piel, como las de nacimiento y las voy a llevar por siempre hasta la eternidad. Tengo que ser fuerte, por vos, por todos, por mí. Tengo que vencer a la adversidad, pensar que todo va a estar bien, e intentar algún día poder olvidar para que no me haga tan mal.

miércoles, 27 de junio de 2012

Cegada


Tomando unos amargos,
quedándome hasta el ocaso.
Todo por querer tu compañía,
y desear que tus manos toquen las mías,
para tener el alma estremecida,
al sentir tu piel junto a la mía.
Quiero que tus labios toquen los míos
y así poder unirnos.
Mi subconsciente asoma su fea cara,
no le hago caso.
Mi mente sigue conspirando con mi corazón
y me grita:
-¡NO TE QUIERE A VOS!
De una vez por todas,
me tengo que dar cuenta,
que te tengo que olvidar,
otra persona voy a encontrar.
Pero estoy negada, estoy cegada.
te quiero a vos, o que no pase nada.

lunes, 25 de junio de 2012

Idiota


Todas mis vagas e incoherentes esperanzas,
se han frustrado con la escena que he mirado.
Quería hacerme pequeña. 
Sí, más. Hasta que me tragara la tierra.
Y me enfade conmigo misma,
por esa absurda reacción,
de añorar algo que nunca he tenido.
-¡BASTA! ¡BASTA YA!- me gritaba el subconsciente.
-No seas ridícula, no seas idiota- continuaba quejumbroso.
No podía estar lamentando el fin de un amor,
que no había tenido principio.

viernes, 22 de junio de 2012

Tus ojos





Nuevos sentimientos.
Miedo a los tropiezos.
Cruce de miradas,
ojos verdes que me llenan el alma.
Ojos profundos,
que completan mi mundo.
Cobardía,
tal ves nunca serás mía.

Amor disfrazado de simpatía.
Pasa otro día,
vos en la tuya y yo en la mía.
Te miro y no me miras,
voy perdiendo la ilusión en cada día.
Intercambio de palabras llanas,
de intentarlo voy perdiendo las ganas.

Espero luego que no sea tarde
para vivir un cuento como los de antes.
Espero ser la que te quite los recuerdos,
de aquel amor viejo, para que vivas sin tormentos.
Solo te pido que me des un segundo,
"dame la mano y vamos a darle la vuelta al mundo".

jueves, 21 de junio de 2012

Ella quiere respirar

Y así se va el mundo. Hay veces en que deseo sinceramente que Noé y su comitiva hubiesen perdido el barco -piensa Juan, sentado en una silla en el jardín de su casa, mientras la noche se iba haciendo eterna.
La gente salía corriendo desesperadamente de sus casas, sin saber que hacer, ni como reaccionar, y mucho menos para donde ir. A lo lejos se escuchaba una radio que todavía transmitía, ya que los aparatos tecnológicos funcionaban vagamente, avisaba que estaban todos los caminos cerrados, tanto por tierra, como por agua, y por aire era impensado, debido a la gran nube de tóxicos que se avecinaba, y que se iba arrastrando lentamente con la brisa veraniega.
Todo era un caos, las muchedumbres corrían de un lado al otro como hormigas cuando se le echa agua en su hormiguero, la nube negra seguía avanzando, pero no era solo una nube, sino una inmensa capa que estaba por cubrir toda la Tierra cuando se juntaran sus dos extremos en la Antartida.
No tenían mucho por hacer, o esperaban sentados y tranquilos a la muerte o te se alejaban lo más que podían, para que la muerte los sorprenda en otro lado. Las horas pasaban cada vez más rápido y cada vez había más gente, ya pocos corrían, era como si se entregaran al destino, había muchas familias que se reunían para decirse el último adiós, grupos religiosos que encomendaban su alma a Dios, y unos cuantos que no soportaban la presión y querían suicidarse pero no tenían agallas, solo se echaban a llorar.
El panorama era cada vez más desolador, ya podían sentir el aire más denso, y veían en los autos, los techos de las casas y hasta en la acera como se teñían de un polvo gris, parecido a la ceniza. Respirar se les hacía cada vez más complicado, muchos caían dándose por vencidos, otros colocaban en sus bocas bolsas para tratar de respirar un aire un poco más puro.
Llego un momento en que los minutos se hacían eternos, los pocos que quedaban con vida querían terminar con todo. La nube no solo se expandía sino que quería hacer pie y de a poco cubría los cuerpos esparcidos por doquier.
La humanidad estaba perdida gracias a la vanidad de ella misma, si hubieran sabido lo que ocurriría tal ves lo podrían haber remediado. 
-¿Tanto costaba ayudar a la madre naturaleza? ¿Tanto, tanto, tanto? - murmuraba Juan, tratando de dar su última bocanada de aire, para dejarse llevar al final que hace tiempo sabia que le esperaba.
Así fue como todo quedo a oscuras, en silencio y cuando la última persona dejó de respirar, ahí recién lo pudo hacer la Tierra, y como por arte de magia el sol salió entre las penumbras y brillo como nunca antes lo había echo.